Estas gemelitas tan lindas hacen que su pobre papá tenga que trabajar el doble para poder hacer el desayuno y para poder mantenerlas entretenidas al mismo tiempo.
Muchas personas creen equivocadamente, que aun viviendo una vida disoluta y alejada de lo que Dios dice en sus mandamientos, al final él igual va a perdonarlos. Pero, pensar así, es una falta total de responsabilidad. Por otro lado…