Simpático perrito no quiere que le hagan caricias a su amigo, las quiere todas para él… es un poco envidioso pero no deja de ser un poco tierno y chistoso.
Muchas personas creen equivocadamente, que aun viviendo una vida disoluta y alejada de lo que Dios dice en sus mandamientos, al final él igual va a perdonarlos. Pero, pensar así, es una falta total de responsabilidad. Por otro lado…