Esta madre no tenía ni idea de que su hijo estaba volando a casa de Londres y su reacción es la más dulce. ¡La familia es una maravillosa bendición del Señor!
Si puso tanto cuidado en cada uno de nosotros, y si aún los detalles que parecen insignificantes para nosotros, Dios los conoce y no pasa nada por desapercibido, ¿por qué creer que no le importamos o que tiene cosas más importantes que atender?