Tiene que ver lo lindo de estos loros cantando alabanzas a Dios. Cuando uno se cansaba el otro tomaba la voz principal… ¡Tuve que verlo varias veces para creer esta lindura!
Muchas personas creen equivocadamente, que aun viviendo una vida disoluta y alejada de lo que Dios dice en sus mandamientos, al final él igual va a perdonarlos. Pero, pensar así, es una falta total de responsabilidad. Por otro lado…