Paseando por el bosque estos dos muchachos se toparon con un venado atorado en las orillas del rio, así que decidieron actuar y rescatar al asustado animal quien de inmediato salio corriendo por todo el bosque.
Abandonado a su suerte, el hombre se destruirá a sí mismo yendo tras placeres y deseos egocéntricos. Dios tiene un plan mejor para nosotros: dirigirnos hacia la libertad perfecta en Cristo, guiados por su tierna mano. Cuando nos desviamos, Él aprieta su mano y nos hace volver al buen camino.