Muchas mamás pasan los momentos previos al nacimiento de sus hijos en reposo, pero esta madre no es como todas las demas, ella prefiere bailar un poco para relajar el cuerpo y la mente.
Abandonado a su suerte, el hombre se destruirá a sí mismo yendo tras placeres y deseos egocéntricos. Dios tiene un plan mejor para nosotros: dirigirnos hacia la libertad perfecta en Cristo, guiados por su tierna mano. Cuando nos desviamos, Él aprieta su mano y nos hace volver al buen camino.