Esta pareja quería que su perrita aprendiera a nadar para que no le pasara nada si algun dia caía a la piscina por accidente. Aunque algo timida al principio rapidamente agarro confianza en lo que hacia.
Abandonado a su suerte, el hombre se destruirá a sí mismo yendo tras placeres y deseos egocéntricos. Dios tiene un plan mejor para nosotros: dirigirnos hacia la libertad perfecta en Cristo, guiados por su tierna mano. Cuando nos desviamos, Él aprieta su mano y nos hace volver al buen camino.