Cuando este perrito juguetón salió a jugar en el patio, ¡se encontró con un nuevo amigo… o eso pensaba! ¡Mire como él trata de jugar con la cosa más divertida!
Abandonado a su suerte, el hombre se destruirá a sí mismo yendo tras placeres y deseos egocéntricos. Dios tiene un plan mejor para nosotros: dirigirnos hacia la libertad perfecta en Cristo, guiados por su tierna mano. Cuando nos desviamos, Él aprieta su mano y nos hace volver al buen camino.