Cuando este perrito juguetón salió a jugar en el patio, ¡se encontró con un nuevo amigo… o eso pensaba! ¡Mire como él trata de jugar con la cosa más divertida!
Si puso tanto cuidado en cada uno de nosotros, y si aún los detalles que parecen insignificantes para nosotros, Dios los conoce y no pasa nada por desapercibido, ¿por qué creer que no le importamos o que tiene cosas más importantes que atender?