Cuando la canción favorita de Louie la cacatúa empieza a sonar él no puede resistir la urgencia de bailar y sacudir su plumas por toda la cocina. Quien quiere bailar con Louie!?!?
Abandonado a su suerte, el hombre se destruirá a sí mismo yendo tras placeres y deseos egocéntricos. Dios tiene un plan mejor para nosotros: dirigirnos hacia la libertad perfecta en Cristo, guiados por su tierna mano. Cuando nos desviamos, Él aprieta su mano y nos hace volver al buen camino.