Este bebé estaba jugando con su mamá en el patio cuando se encontraron con una curiosa visita, un joven venado quiso llegar a conocer al pequeño bebé y asi comenzaron a jugar.
Abandonado a su suerte, el hombre se destruirá a sí mismo yendo tras placeres y deseos egocéntricos. Dios tiene un plan mejor para nosotros: dirigirnos hacia la libertad perfecta en Cristo, guiados por su tierna mano. Cuando nos desviamos, Él aprieta su mano y nos hace volver al buen camino.