Laura tuvo que estar en el hospital por 3 semanas debido a sus sesiones de quimioterapia alejándose de su querido hijo, asi que a la hora de regresar a casa fue recibida de esta gran manera.
Abandonado a su suerte, el hombre se destruirá a sí mismo yendo tras placeres y deseos egocéntricos. Dios tiene un plan mejor para nosotros: dirigirnos hacia la libertad perfecta en Cristo, guiados por su tierna mano. Cuando nos desviamos, Él aprieta su mano y nos hace volver al buen camino.