Breanna nació con un impedimeto de oido, por años tuvo que aprender a leer los labios de su madre, hasta que a los 14 años pudo finalmente recivir un implante auricular lo que le permitió por priemra vez escuchar la dulce voz de su madre.
Abandonado a su suerte, el hombre se destruirá a sí mismo yendo tras placeres y deseos egocéntricos. Dios tiene un plan mejor para nosotros: dirigirnos hacia la libertad perfecta en Cristo, guiados por su tierna mano. Cuando nos desviamos, Él aprieta su mano y nos hace volver al buen camino.