Muchas veces es facíl sentirnos victimas de todo y justificar que no podemos ser felices por que no tenemos lo que queremos, pero, ¿cuantos de nosotros estamos 100% bendecidos todos los días pero estamos muy distraidos para notarlo?
Muchas personas creen equivocadamente, que aun viviendo una vida disoluta y alejada de lo que Dios dice en sus mandamientos, al final él igual va a perdonarlos. Pero, pensar así, es una falta total de responsabilidad. Por otro lado…