La gente bondadosa de la “The Humane Society of the United States” encontró a Duffy en condiciones deplorables en un pequeño cuarto oscuro donde no podía caminar. Pero gracias al tratamiento que le dieron Duffy esta muy sano el dia de hoy.
Abandonado a su suerte, el hombre se destruirá a sí mismo yendo tras placeres y deseos egocéntricos. Dios tiene un plan mejor para nosotros: dirigirnos hacia la libertad perfecta en Cristo, guiados por su tierna mano. Cuando nos desviamos, Él aprieta su mano y nos hace volver al buen camino.