Este perrito vio que era conveniente subirse al caparazón de su amiga tortuga. Al fin que alcabo lo importante no es llegar primero, pero hay que saber llegar.
Muchas personas creen equivocadamente, que aun viviendo una vida disoluta y alejada de lo que Dios dice en sus mandamientos, al final él igual va a perdonarlos. Pero, pensar así, es una falta total de responsabilidad. Por otro lado…