Tomado de: ‘Su Ángel’

Autor Desconocido


Había una vez un niño que estaba a punto de nacer. Así que, un día le dijo a Dios: -“Me dicen que pronto voy a nacer, pero ¿cómo voy a vivir allá afuera siendo tan pequeño e indefenso?”


Dios le respondió: -“Entre los muchos ángeles, escogí uno para ti. Tu ángel estará esperándote y cuidará de ti.”

-“Pero Dios, ahora, no hago otra cosa más que cantar y sonreír, y eso es suficiente para que yo sea feliz.”

-“Tu ángel cantará para ti y también sonreirá para ti todos los días. Sentirás el amor de tu ángel y sentirás alegría.”

-“¿Y cómo voy a ser capaz de entender cuando la gente me hable, si no conozco el idioma que hablan afuera?”

-“Tu ángel te dirá las palabras más bellas y dulces que jamás hayas escuchado. Y con mucha paciencia y cariño, tu ángel te enseñará a hablar.”

-“¿Y qué voy a hacer cuando quiera hablar CONTIGO?”

-“Tu ángel te juntará las manitas y te enseñará a orar.”

 


Después el niño le dijo a Dios: -“He oído que afuera hay hombres malos. ¿Quién me protegerá?”

-“Tu ángel te defenderá, aunque eso signifique poner en riesgo su vida.”

-“Pero estaré siempre triste porque no Te veré más.”

-“Tu ángel siempre te hablará de Mí y te enseñará el camino para que regreses a Mí, aunque Yo siempre estaré a tu lado.”

 


En ese momento el niño sintió mucha paz, pero también sentía ya la fuerza que lo impulsaba a la aventura de un mundo nuevo. El niño, a toda prisa, preguntó en voz baja:

-“Oh Dios, si estoy a punto de nacer ahora, por favor dime el nombre de mi ángel.”

-“El nombre de tu ángel no es de importancia. Tú sólo la llamarás: Mamá.”

 

Proverbios 31:28-29 

¡Damos gracias a Dios por nuestras madres que tanto se han sacrificado por nosotros!

Créditos: GodVine | Inspirational Archive