Laura Bretan de tan solo 13 años tiene una voz prodigiosa que tienes que escuchar para creer. Antes de su audición ella estaba tan nerviosa que no sabía que hacer así que solo comenzó a cantar y en un momento llenó todo el auditorio con su gran voz.
Si puso tanto cuidado en cada uno de nosotros, y si aún los detalles que parecen insignificantes para nosotros, Dios los conoce y no pasa nada por desapercibido, ¿por qué creer que no le importamos o que tiene cosas más importantes que atender?