Esta pequeñita en verdad quiere a su hermano, solo mira lo emocionada que se pone al ver que su hermano va llegando en el camion de la escuela. Las cosas mas bonitas a veces pueden ser tan simples.
Muchas personas creen equivocadamente, que aun viviendo una vida disoluta y alejada de lo que Dios dice en sus mandamientos, al final él igual va a perdonarlos. Pero, pensar así, es una falta total de responsabilidad. Por otro lado…