Después de una cirugía poco invasiva, este pequeño felino tuvo que usar un collarín alrededor de su cuello para recuperarse. Aunque los gatos no aguantan tener el collarín, este compadre se las ingenio para utilizar el collarín como un vaso de agua.
Como seguidores de Cristo y creyentes de Sus promesas a menudo dejamos de concentrarnos en JESÚS y en cambio nos concentramos en nuestras presentes circunstancias. Queremos caminar por fe pero eso puede ser un largo camino…