Kevin y Beberly Eilat tienen sólo 6 y 7 años de edad, ¡y han sido bendecidos con un talento increíble! Espere hasta que vea sus pequeñitos pies moverse.
Si puso tanto cuidado en cada uno de nosotros, y si aún los detalles que parecen insignificantes para nosotros, Dios los conoce y no pasa nada por desapercibido, ¿por qué creer que no le importamos o que tiene cosas más importantes que atender?