En lugar de intentar ganar la carrera, los corredores se desviaron para honrar a este precioso veterano de la Segunda Guerra Mundial, Joe Bell. Este hombre de 95-años de edad, salió a apoyar la carrera de caridad que beneficiaba a los veteranos militares y a sus familias. ¡Gracias a Dios por estas bondadosas personas que reconocieron el servicio de este hombre a su país de una manera tan maravillosa!