Este pequeño alumno tiene una bendición enorme y divertida que le espera de regreso a casa cada día. Seguramente es el mejor momento del día para su mascota también. ¡Los animales son una bendición de Dios!
Abandonado a su suerte, el hombre se destruirá a sí mismo yendo tras placeres y deseos egocéntricos. Dios tiene un plan mejor para nosotros: dirigirnos hacia la libertad perfecta en Cristo, guiados por su tierna mano. Cuando nos desviamos, Él aprieta su mano y nos hace volver al buen camino.