Durante un espectáculo de medio tiempo, este hombre comenzó a bailar como si nadie estuviera viendo, ¡aunque todo el mundo lo veía! ¡Su espontaneidad le hará reír!
Muchas personas creen equivocadamente, que aun viviendo una vida disoluta y alejada de lo que Dios dice en sus mandamientos, al final él igual va a perdonarlos. Pero, pensar así, es una falta total de responsabilidad. Por otro lado…