Cuando este pequeño individuo anotó un gol, la multitud enloqueció. Pero esa no fue la mejor parte. Espere hasta que vea su reacción. ¡No tiene precio!
¿Qué lo motiva a usted? ¿Qué ocupa su energía, domina su tiempo y lo hace funcionar? El apóstol Pablo da testimonio de lo que lo impulsaba y es un ejemplo para todo cristiano...