Soldado regresa a casa después de 6 meses fuera y la mejor bienvenida se la dio su perrita labrador. La cachorra no pudo soportar la emoción ni tampoco los llantos que soltó cuando fue abrazada por su dueño.
Muchas personas creen equivocadamente, que aun viviendo una vida disoluta y alejada de lo que Dios dice en sus mandamientos, al final él igual va a perdonarlos. Pero, pensar así, es una falta total de responsabilidad. Por otro lado…