Y El me ha dicho: Te basta mi gracia, pues mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, muy gustosamente me gloriar? m?s bien en mis debilidades, para que el poder de Cristo more en m?. Por eso me complazco en las debilidades, en insultos, en privaciones, en persecuciones y en angustias por amor a Cristo; porque cuando soy d?bil, entonces soy fuerte. Leer La Biblia